El Honda Accord se quedó con el premio al Auto del Año en la previa del Salón de Detroit, pero ese no es el único galardón que se entrega en el salón estadounidense. Desde hace algunos años, debido a las enormes diferencias entre todos los vehículos que componen el segmento "trucks" en EE.UU., el jurado decidió dividir el premio para no hacer competir a SUVs, Crossovers, pick-ups y camionetas por igual.
Así, mientras la Volvo XC60 se quedó con el premio a la mejor SUV, la ganadora del premio a la mejor camioneta fue una oriunda del país local. Se trata de la Lincoln Navigator, que se impuso frente a otras dos marcas estadounidense: la Chevrolet Colorado ZR2 y la Ford Expedition.
Con su victoria, la Navigator logró el título que ostentaba la Honda Ridgeline, la ganadora del año anterior.