El SEAT Leon Súper Copa no podía dejar de estar presente en nuestro Especial de lo Mejor del 2012, ya que además de ofrecer un atractivo diseño, su desempeño impresiona a cualquiera.
Su diseño, muy acorde a la familia SEAT, ostenta en el frente un enorme paragolpes con tres tomas de aire y una diminuta parrilla donde se alberga el logo de la marca. Sus faros alargados son bixenón. Además porta faldones en los laterales, así como un difusor en la parte trasera. Combinados estos elementos le dan un toque sobrio, deportivo y bastante imponente que en la ruta te abren paso al momento de pasar a alguien.
Con respecto al tren motriz trae el mismo propulsor de 2.0L de cuatro cilindros que le versión FR (Fórmula Racing), pero con un turbo más grande, así como mejoras en la gestión electrónica y el sistema de escape, con esto da un total de 265 CV, liberados a través de su caja manual de seis velocidades.
Por dentro de esta Edición Especial Súper Copa, encontramos asientos deportivos exclusivos forrados en Alcantara color rojo. El volante es plano en la parte inferior e igualmente encontramos ciertas nomenclaturas de FR.
Este rey Leon de la velocidad es sin duda uno de los mejores productos de la marca española, ya que sin ser un vehículo costoso –comparado a otros- destaca primordialmente por sus prestaciones mecánicas y de manejo que sorprende a cualquiera, además de enamorarte por su excelente respuesta al pisar el acelerador.
Desde el arranque hasta su máxima velocidad, el trabajo del turbo es notable, el lag –o demora- es imperceptible y además el peculiar sonido que otorga el sistema de escape es increíble. Acelerando levemente o a fondo, la potencia es impresionante.
Además de probarlo en pista, tuvimos la oportunidad de usarlo en el tránsito y aquí es donde se agradece una asombrosa respuesta, ya que permite hacer sobrepasos casi al instante.
El trabajo de las seis velocidades es bastante cómodo y permisible, es decir, no es necesario revolucionarlo a tope para obtener todo el torque posible, ya que desde aproximadamente las 3.000 revoluciones la aceleración es bastante impetuosa. En las curvas es muy estable, se pega al asfalto y da una seguridad inigualable, la dirección así como el trabajo de la suspensión hacen que la sensación de subviraje sea prácticamente nula.
Los únicos “peros” que en lo personal le encuentro a este automóvil es que haría la dirección un poco más rígida a altas velocidades y le integraría un navegador o un mejor sistema de conectividad, ya que el que trae es muy básico.
SEAT Leon Súper Copa 2013