Antes de comenzar hablar de este sedán deportivo de lujo, hay que aclarar que la familia V-Series en Cadillac se trata de modelos con altas prestaciones deportivas. Este Cadillac ATS-V viene a integrarse a la gama y se comercializa en dos versiones coupé y sedán, como el pusimos en pista.
Diseño
Estéticamente es igual a un ATS normal; sin embargo, tiene detalles que lo hacen singular como los nuevos paragolpes con tomas de aire más grandes, parrilla con forma de panal, capot abultado con salidas de aire, llantas exclusivas de 19”, cálipers que se pueden pedirse en colores, alerón en la tapa del baúl, faldones y un difusor trasero flanqueado por dos salidas de escape.
Datos técnicos y mecánica
Uno de los principales cambios a los que fue sometido es precisamente el motor, sustituyendo el cuatro cilindros turbo por un 3.6L V6 con inyección directa y dos turbos que entrega 464 equinos y 602 Nm, transmitidos al eje trasero a través de una transmisión automática de ocho velocidades.
Con respecto a la suspensión es McPherson adelante y Multi Link atrás con Magnetic Ride de tercera generación, esto significa que es 40% más rápida para amortiguar y lee constantemente las condiciones del camino para reaccionar en milésimas de segundo.
Interior
Alberga cómodamente a cuatro pasajeros; sin embargo sentimos que el espacio para las piernas es algo limitado, algo causado por el ostentoso tamaño de los asientos delanteros.
Referente a equipamiento trae todo lo que podemos esperar en un vehículo premium, pero deseamos destacar el sistema de infoentretenimiento con navegador, pantalla táctil de 8”, reproductor Mp3, CD, radio y conectividad para Android Auto y Apple Car Play, entrada USB y Bluetooth y sensores de estacionamiento delanteros como traseros.
Hablando del diseño en el habitáculo, al igual que en el exterior, encontramos detalles deportivos que lo diferencian del ATS tradicional, éstos son asientos deportivos Recaro, pedales, terminaciones en alcántara en diversas partes y emblemas con la letra V.
Comportamiento dinámico
Lo primero que deseamos destacar es que posee cuatro modos de conducción: Turismo, Deportivo, Nieve/Hielo y Pista. En este último contamos con la función de Launch Control, ideal para una aceleración de vértigo. En cualquiera de las diferentes opciones se nota una gran diferencia, la dirección se endurece al igual que la amortiguación y se afina la respuesta del pedal derecho.
Con un peso de 1.678 Kg, al volante este deportivo de 464 caballos nos entrega una aceleración de 0 a 100 Km/h en sólo 4 segundos y llega a una velocidad máxima de 300 Km/h.
En relación a los frenos, los discos de 368 mm adelante y atrás de 337 mm funcionan a la perfección respondiendo con premura y son realmente precisos, dan mucha confianza al sólo tocarlos ligeramente.
Por otra parte la dirección eléctrica progresiva, es buena, sin embargo creemos que no retroalimenta bien lo que sucede en las ruedas delanteras. Tomando curvas y en giros bruscos responde bien y se siente bastante estable.
Conclusiones
Este Cadillac ATS-V nos gustó y mucho, creemos que es el balance perfecto entre lujo y desempeño motriz. Un digno adversario estadounidense contra los dos alemanes: el BMW M4 y el Mercedes-AMG C63 S. Lo probamos en ciudad, ruta y pista, y su comportamiento en cualquiera de las tres circunstancias fue de lo mejor, es bastante divertido de manejar y responde con premura al pisar el acelerador. Es un auto muy veloz, súper estable en curvas con un muchísimo agarre y en ningún momento se siente nervioso en la parte trasera.
Cadillac ATS-V 2016 a prueba