La renovación del Mercedes Benz Clase E llega acompañada por su variante deportiva firmada por AMG, que aumenta la potencia del 5.5L V8 bi-turbo, suma tracción 4Matic deportiva y agrega sugerentes cambios estéticos.
Ofrecido en versiones sedán y familiar, visualmente se destaca el frontal con las dos grandes tomas dinámicas laterales unidas por un grueso labio metalizado que corre debajo de la parrilla principal. El escudo de la marca está sostenido por dos brazos cromados y los faros repiten el estilo del renovado Clase E “civil”.
Debajo del capot las novedades son más interesantes, el poderoso V8 incrementa su potencia alcanzando los 550 CV (+32) y hay una versión S con 575 caballos. La transmisión es una AMG Speedshift MCT de doble embrague y la descarga es a las cuatro ruedas mediante un sistema integral que deriva el 67% del torque a las ruedas traseras para lograr un desempeño más deportivo.
Las prestaciones indican un 0 a 100 km/h de 3.6 segundos y una velocidad máxima autolimitada de 250 km/h en el E AMG “normal”, que se estira hasta los 300 km/h si se cuenta con el paquete AMG Performnace.
El aspecto dinámico queda en manos de la suspensión adaptativa firmada AMG con resortes convencionales adelante y sistema neumático en el tren posterior. Además el Mercedes Benz E AMG S suma un diferencial LSD en el eje trasero. En fin, todo para seguir siendo uno de los sedanes más rápidos del mundo.
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