Con el paso de los años la tecnología en diversos rubros da pasos agigantados y especialmente en los autos. Aquí se han desarrollado varias que han beneficiado la mecánica del vehículo y se reflejan en un manejo más divertido. Igualmente son amigables con el ambiente. Aquí te resumimos 5 de ellas.
1.- Desactivación de cilindros
Existen motores que sólo usan los cilindros que requieren según las circusntancias. Por ejemplo hablando del Audi S8 cuando acelera de 0 a 100 Km en 4.2 segundos, requiere que sus ocho cilindros estén trabajando a la máxima potencia.
Pero cuando alcanza la velocidad de crucero y no se requiere una carga de trabajo mayor. Cuatro de los ocho cilindros dejan de operar completamente, por lo que el motor actúa como si fuera de cuatro cilindros. Este proceso se repite, si se requiere mayor desempeño y después se mantiene una velocidad continúa. Esta tecnología mejora el rendimiento de combustible en un 10%.
En el caso de Audi, éste utiliza un sistema activo de control para el ruido, el cual mantiene el sonido del motor y el escape de manera constante, para que los pasajeros no noten la diferencia, cuando los cilindros están apagados o se enciendan.
2. Impulso de potencia "eléctrica"
Actualmente los vehículos híbridos se encuentran ya circulando en diversas ciudades alrededor del mundo, su tecnología ha permitido que el rendimiento de combustible sea realmente muy alto. Además de esto contaminan menos y las baterías con las que cuentan, han demostrado ser confiables al igual que duraderas. No obstante un “problema” que se encuentran en estos autos, es su pobre respuesta al momento de arrancar.
Pensando en esto, la marca Jaguar presentó en el pasado Salón de Frankfurt 2011 el concepto C-X16, el cual portaba un V6 naftero sobrealimentado de 3.0 L y un motor eléctrico -al igual que otros híbridos. Pero tenía la función de un botón llamado “push to pass”, localizado en el volante del conductor. Al presionarlo se activaba el motor eléctrico, para que éste otorgara un impulso de 70 caballos adicionales –muy similar al dispositivo KERS que se utiliza en las carreras de la Fórmula 1. En combinación con el propulsor de combustión, este prototipo podía acelerar de 0 a 100 Km/h en 4.5 segundos y tener una velocidad máxima de 300 Km/h.
3. Flex Fuel
Esta tecnología, la cual permite al conductor escoger entre nafta o una mezcla de etanol, ya está circulando desde hace tiempo en diversos autos, especialmente en Brasil, donde el uso del derivado de la caña es moneda corriente.
A la combinación de etanol se les ha designado la letra E seguida de un número; ejemplo E85 significa que el combustible es 85 por ciento etanol y 15% nafta. La placa “Flex Fuel” en algunos vehículos, usualmente significa que pueden usar hasta E85 o en su caso, una mezcla menor por ejemplo un E10 (10% de etanol y 90% de gasolina).
En los países del norte los vehículos Flex Fuel son grandes pick ups o SUVs, quienes consumen mucho combustible, mientras que en Brasil el etanol se usa en todos los modelos, desde los más populares compactos y medianos. El etanol tiene un alto nivel de octanos, pero otorga menos kilómetros por litro al momento de usarlo. Igualmente es fácil de fabricar, ya que se obtiene de fuentes biológicas como la caña de azúcar.
Actualmente marcas como Bentley han estandarizado toda su gama de vehículos con la tecnología Flex Fuel, empezando con el Bentley Continental SuperSports, el Bentley más rápido hasta ahora.
Por otra parte los ingenieros de la marca sueca de autos Koenigsegg, usan el etanol para aumentar la potencia en sus unidades y ser más ecológicos en el proceso. Ejemplo de esto es la edición limitada del modelo CCXR, el cual tiene un motor que otorga 806 Hp al ser impulsado por gasolina. Pero cuando se llena el tanque con una mezcla de etanol de alto octanaje, el propulsor puede generar una potencia de 1.018 caballos.
4. Inyección directa
La mayoría de los vehículos hoy en día mezclan el combustible y el aire antes de introducirse a la cámara de combustión. En un motor de inyección directa, el combustible altamente presurizado es introducido inmediatamente en la parte alta de la cámara de combustión generalmente cerca de la bujía.
Esto puede ocasionar cierta presión dentro de la cámara de combustión y que se genere un golpeteo. Ford Motor Company ha resuelto este problema, combinando la inyección directa con un turbo, el cual usa los gases del escape para mejorar su desempeño.
Al juntar estas dos tecnologías. Ford ha construido motores que son más poderosos que sus predecesores, igualmente son más pequeños y consumen menos combustible. La marca del óvalo azul llama a estos propulsores EcoBoost.
Actualmente se puede adquirir una Ford F-Series Super Duty, con una máquina de 6.8 L V10 con 362 CV o una F-150 con motor EcoBoost, de 3.5 L con 365 equinos y . Similar desempeño, pero en una pick up más pequeña y ligera.
Volkswagen y Audi también utilizan la inyección directa en sus motores sobrealimentados y la llama TFSi o TSi por Turbo Fuel (combustible) Stratified (estratificada, por el tipo de mezcla) Injection.
5. Altos índices de compresión
Una manera de mejorar el desempeño y la economía de combustible, es aumentando la relación de comprensión dentro de un motor.
La relación de compresión se refiere a la cantidad de combustible y aire comprimido dentro de la cámara de combustión. En otras palabras, es la capacidad de un motor de oprimir un volumen de aire mezclado con combustible un número de veces determinado. Cuando esta relación es muy alta, el combustible se utiliza más eficientemente.
La marca japonesa Mazda está usando este acercamiento en la última generación de sus vehículos, ambos impulsados por nafta o gasoil. El motor SKYACTIV-G, por ejemplo, usa una relación de comprensión de 13:1 en Norteamérica, cuando la norma es 10:1. En Europa los autos con SKYACTIV-G tienen un índice de 14:1, esto es porque más gente usa combustibles de alto octanaje regularmente.
El problema con los altos índices de comprensión es usualmente el sonido de golpeteo en el motor, que ocurre cuando la temperatura y la presión son muy elevadas dentro de la cámara de combustión, mientras la mezcla de aire-combustible se enciende con anticipación. Un combustible con alto octanaje puede ayudar en parte a resolver este problema, pero Mazda ha desarrollado un colector de escape más largo que reduce la temperatura y el golpeteo en el propulsor. El sistema SKYACTIV-G también tiene un tiempo de combustión más rápido, lo que significa que la combinación de aire-combustible, se enciende adecuadamente antes que la temperatura suba y el cascabeleo comience.
Esta tecnología, junto con materiales más ligeros y una nueva transmisión, ahorran un 15% el consumo de combustible y de emisiones. Al mismo tiempo otorga 15 por ciento más de torque, lo que se traduce en un mejor desempeño y un manejo más divertido.