A diferencia de los barcos, los autos no fueron hechos para flotar. ¿Por qué digo esto? Porque al parecer, se hunden más autos al año que barcos. Las razones para que el vehículo entre al agua pueden ser muchas, pero algo es inevitable, se va a ir al fondo y mucho más rápido de lo que pensás. Por eso acá tenés una serie de consejos simples para salir vivo.
30 segundos a 2 minutos
Eso es lo que puede mantenerse a flote, en promedio, un auto, así que olvídate de llamar a las emergencias, para cuando te hayan atendido vas a estar bajo agua. Si no tenés los poderes de Aquaman, vas a tener que actuar rápido y metódicamente para escapar, aún bajo el stress de tan especial situación.
¿Esperar a que se hunda o empezar antes?
vas a tener que actuar rápido y metódicamente para escapar
La teoría indica que es muy difícil abrir las puertas cuando el agua empieza a cubrirlas. Esto se debe a la diferencia de presión y para que se equipare tenés que esperar a que el auto se llene de agua. El problema es que la igualación de presión no es instantánea y hay que esperar a que el auto siga “buceando” hacia el fondo, por lo que este método no es el más recomendable. ¿Qué hacer entonces?
Si el agua aún no cubre la mayor parte de la superficie de las puertas, vas a poder abrirlas con algo de esfuerzo, pero recordá que una vez abierta una puerta tenés entre 5 a 10 segundos para que el auto inicie su descenso hacia el fondo, así que mejor prestá atención a los siguientes consejos.
Paso a paso
1 - El cinturón primero
- Lo primero que tenés que hacer es desabrocharte el cinturón.
- Si estás con chicos, lo segundo que tenés que hacer es asistirlos para desabrocharse el suyo lo antes posible.
2 - Ventanilla
- Lo segundo que tenés que hacer es bajar las ventanillas. Si el sistema es eléctrico, debería funcionar hasta 3 minutos de la entrada al agua.
- Si la ventanilla no abre, vas a tener que romperla, lo ideal es usar los pies o algún objeto contundente que tengas a mano.
- Ni se te ocurra luchar contra el parabrisas, es mucho más resistente y si es laminado, va a ser muy difícil abrir un hueco por donde salir.
3 – Salí del auto
Una vez que abriste la ventanilla, si le agua ya pasó la cintura el auto va a empezar a hundirse mucho más rápido. Sacá a los chicos primero, después salí e intentá no nadar pataleando para no golpear a nadie.
Mejor que curar es…
Prestá atención. Esperamos que nunca te pase algo similar, y acordate que el GPS no siempre te lleva por el mejor camino, así que prestá atención y no gires ciegamente donde te lo indica. Hay varios casos en los que sucedió algo similar, como el de la joven que terminó en un lago congelado de Canadá y que pudo escapar rápidamente antes de que su Toyota Yaris terminara a 30 metros de profundidad.