Ya sea con frío o con calor, las temporadas están viniendo cada vez más agresivas y tu auto lo siente, por eso es fundamental que el sistema de refrigeración funcione correctamente (también con frío) y dentro de eso el uso del líquido refrigerante o anticongelante adecuado es crucial. Aclarando los siguientes puntos, vas a tener lo necesario para cuidar y mantener sano tu auto.
1.- Anticongelante y refrigerante es lo mismo: VERDADERO
Por lo general decimos “anticongelante”, pero la realidad es que técnicamente el mismo fluido se encarga de mantener la temperatura optima del motor en cualquiera de las condiciones: frio o calor. Sus diferentes compuestos evitan la corrosión de los componentes en el sistema evitando tanto el congelamiento como el punto de ebullición.
2.- Existen diferentes tipos: VERDADERO
En el mercado se oferta gran variedad de estos fluidos, todos con especificaciones distintas que, NUNCA son iguales para todos los vehículos, sin embargo, básicamente se dividen en cuatro grupos, según sus compuestos y ojo, que de esto dependerá su color:
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Silicatos (IAT): verde
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Ácidos orgánicos (OAT): rojo o naranja
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Silicatos mezclados con ácidos orgánicos (HOAT): rosa o amarillo
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A base de propilenglicol: azul o rosa
3.- Se pueden mezclar sin importar el tipo o los colores: FALSO
NUNCA, JAMAS en la vida mezcles fluidos en tu vehículo, el daño puede ser catastrófico. Revisá siempre el manual de tu auto o acudí a talleres certificados, cada uno de los tipos mencionados trabaja con especificaciones distintas y de todos ellos hay uno especial para tu vehículo.
4.- El refrigerante o anticongelante nunca se cambia: FALSO
Usualmente solemos “rellenar” el nivel de fluido en el vaso de expansión o depósito, sin embargo, según el tipo y uso de tu vehículo, dependerá el cambio. El tiempo recomendado para cambiarlo en su totalidad es de dos años o el equivalente en kilometraje. Este servicio lo debe realizar un profesional.
5.- No rellenar el depósito con el motor en marcha o caliente: VERDADERO
En primer lugar, porque ante la despresurización del sistema, el fluido caliente puede salir disparado y causarte quemaduras peligrosas. En segundo lugar, porque puede generarse un vacío con el aire que entre al sistema, lo cual podría ser perjudicial para el motor y/o dañar algún componente como el radiador.
Rellená siempre con el motor en frío y apagado, utilizando el mismo tipo o color de fluido, respetando las líneas indicadoras del depósito.